ACEITES ESENCIALES ECOLÓGICOS

Son concentrados de materia prima vegetal, intensamente aromáticos, volátiles, no grasos y ligeros obtenidos directamente de plantas, raíces, flores, hojas, árboles, en otras palabras, son la esencia de las plantas. Debido a su alta concentración, siempre han de usarse diluidos en otros elementos como aceites vegetales, agua o arcillas.

Dado su potente olor, son ambientadores naturales si los usas a través de humidificadores o difusores, pero tienen muchas otras propiedades dependiendo de la planta de la que procedan, desde relajar y calmar la ansiedad, mejorar el acné y aspecto de la piel, ayudar a conciliar el sueño y descansar mejor, a propiedades medicinales tales como antibióticas, analgésicas, antisépticas, antiinflamatorias, regeneradoras celulares, tonificantes o cicatrizantes.

Para garantizar que estás usando componentes 100% libres de cualquier otra sustancia que no sea natural, sus ingredientes son biodegradables en el aire por lo que estarás ayudando a proteger el medio ambiente de elementos artificiales que pueden resultar nocivos para ti y para el aire que respiras.

¡Claro! Y es que tienen múltiples beneficios para el cabello y al ser naturales no contienen agentes químicos perjudiciales. El de lavanda promueve el crecimiento del cabello, el de romero aporta mayor grosor, el árbol de té es muy efectivo contra la caspa, grasa y picores, y así muchos más.

A través de los sentidos se puede cambiar el estado de humor de una persona, por lo que es muy importante conocer que tipo de aceite queremos usar en nuestro humidificador en cada momento para ambientar nuestra estancia. Por ejemplo, el árbol de té es un perfecto energizante natural que proporciona vitalidad, el de geranio ayuda a borrar energías negativas y activa la creatividad, el aceite de lavanda proporciona relajación y ayuda a conciliar el sueño, etc.

En la aromaterapia, los aceites esenciales se usan con fines terapéuticos, pero fuera de ella tienen infinidad de otros usos como para elaborar tus propios desinfectantes naturales o productos de limpieza caseros, añadidos en la lavadora para dar un toque de aroma a tu ropa, hacer tus propios champús, jabones o cosmética artesanal, como ambientadores, etc..

Un aceite esencial puro se consigue a través de un proceso físico (destilación o extracción), y nunca químico, para lograr mantener todas las propiedades específicas de la planta de la que se obtiene. Por lo que siempre debemos asegurarnos que usemos aceites esenciales puros, como nuestros aceites esenciales ecológicos de BioScents.

Siempre y cuando conozcas la marca del aceite o la tienda que lo venda sea de tu confianza. Deberás asegurarte siempre de escoger aceites esenciales ecológicos y que vengan en envase opaco de vidrio, e idealmente sin plástico, como nuestros aceites esenciales de BioScents.

Árbol de té, eucaliptus, romero y tomillo, son los 4 aceites esenciales que te ayudarán a desinfectar el ambiente y también la desinfección de tu hogar si los añades en tus productos de limpieza caseros.